viernes, 20 de febrero de 2009

La melancolía es mi amiga,
me lleva por calles frías.
La soledad me atormenta y me arruina,
mas al mismo tiempo me protege,
evita que mi corazón se resquebraje,
me lleva de viaje,
allí donde la soledad se convierte en escudo.
A salvo de dolores del alma, puñaladas por la espalda,
ofreciendo la palma y recibiendo a cambio la lanza.

Mar en calma y un alma que clama:
viento, acaba con este sufrimiento;
Trae de nuevo luz a mi tormento.
Escucha el llamamiento, mi humilde intento
...

Silencio...

La lluvia sobre el cabello,
hoy la lluvia sabe salado.
Hoy si, para siempre, se ha acabado.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Estimada señorita:
Puesto que a ambos nos mueve el amor a la cultura, (he visto en su perfil que unas de sus aficiones es la literatura) deseo invitarle a leer el último artículo: “María Jesús Almendro Sánchez; una escritora en ciernes”, que he colgado en mi blog. En el comento de forma breve y concisa lo difícil que es para un escritor novel abrirse camino en el mundo de la cultura nacional española.
¿Qué implica escribir?
¿Existen precios inaceptables, peajes infames a la hora de acceder el escritor, aún desconocido al escenario del reconocimiento y rechazo públicos?
Espero que mis letras sean de su agrado.
Un fuerte abrazo desde tierras canarias.